El coaching deportivo está teniendo un papel fundamental en el deporte actual. Las sesiones de entrenamiento diario, la estricta dieta y una vida tan pautada puede provocar momentos de debilidad en la vida del deportista. Por eso, el apoyo y la orientación de un coach deportivo se ha convertido en una figura indispensable en la meta de muchos deportistas del ámbito profesional.

En el post de hoy hablaremos sobre su trabajo, cuál es su papel y qué cualidades presenta para conseguir el éxito del deportista. Interesante, ¿verdad? Si quieres, puedes convertirte en coach deportivo con el Máster Experto en Entrenamiento Funcional de Alto Rendimiento + Máster Experto en Coaching Deportivo.

¿Qué es el coaching deportivo?

El coaching deportivo es una disciplina que tiene por objetivo estimular el potencial del deportista y así conseguir unos objetivos. Para ello, el coach o entrenador, diseña un plan de acción a través del cual el deportista tomará conciencia de sus capacidades, un ejercicio que estimula su motivación personal.

Aplicación del coaching deportivo

Esta metodología de entrenamiento sobrepasa la cuestión deportiva. De echo, este tipo de sesiones buscan que el deportista se olvide de toda la presión de su carrera profesional para que se centre en su persona, en aquello que le motiva y desea alcanzar. Así, aumenta la autoestima, uno de los fundamentales del coaching deportivo.

Durante estas sesiones, el coach, junto con las necesidades del deportista, elaborará el plan de acción y las estrategias deportivas a seguir.

Habilidades de un coach deportivo profesional

La tarea del coach deportivo es aplicar ciertos valores, referentes a la superación, la fuerza de voluntad y la constancia. Por ello, este profesional se convierte en guía, amigo y entrenador del deportista.

Por ello, no todas las personas pueden desempeñar este tipo de función, ya que se deben dominar ciertas habilidades.

Veamos qué tres requisitos debe contemplar un buen coach deportivo:

Liderazgo

Ser coach significa ser líder. Pero no se trata de ser un líder objetivamente, sino también se trata de ser líder y amigo a la vez. Es decir, marcar las distancias cuando sea necesario pero saber crear confianza con el deportista.

Saber comunicar

En coaching deportivo es fundamental saber transmitir valores y, sobre todo, la estrategia a seguir. Para ello, el coach debe saber cómo motivar, dar ideas y guiar de una manera cercana, divertida pero con autoridad.

Canalizar emociones

Un buen coach debe saber canalizar sus emociones para no interferir en el entrenamiento del deportista. Se trata de saber en todo momento cuál es su sitio como coach y por lo tanto, tocar los pies en el suelo.